El mayor fallo de la gestión es que ni los pescadores ni los gestores poseen los conocimientos necesarios para dirigir algo tan complejo como un ecosistema marino costero. El derecho a pescar no se debería basar en si uno dispone del dinero suficiente para comprarse un barco, sino en los conocimientos y la voluntad de trabajar en colaboración con los gestores y los científicos para hacer que la pesca sea sostenible. El derecho a pescar se debería ganar o perder según la voluntad de aceptar unos límites razonables a las capturas.
Paul Greenberg
15 de julio de 2012
El Humboldt: información y desinformación
La información de la ejecución presupuestal
del IMARPE en cuanto concierne a la remotorización del BIC Humboldt ha sido
expuesta en el suplemento de la revista Pesca de Julio publicado en el
siguiente enlace:
No es totalmente coherente con la noticia
transcrita a continuación, como puede deducirse de un debido análisis de todo lo actuado al
respecto.
En febrero del 2007 el buque de
investigación científica (BIC) Humboldt arribó por última vez al Callao,
procedente de la Antártida. Desde entonces, suspendió sus actividades para
iniciar un proceso de reparación y modernización. Con ello se espera alargar
por 20 años más la vida útil de la nave. Si quieres conocer más sobre este
interesante tema, sigue leyendo el reportaje de Angela Tejeda Ghiggo.
Diez años después, en 1988, se decidió
enviarlo a la Antártida y desde entonces ha sido protagonista de las
expediciones para los estudios oceanográficos y el traslado de investigadores a
la estación científica Machu Picchu, en la isla Rey Jorge, en el continente
helado.
El
Comercio entrevistó al almirante Germán Vásquez Solís, presidente del Instituto
del Mar Peruano (Imarpe), quien informó que el buque se encuentra en el
astillero de los Servicios Industriales de la Marina (SIMA), donde es reparado
desde hace un año a pedido de su institución.
“La reparación comprende dos etapas: la
remotorización de la nave y la modernización de la habitabilidad. La primera
parte está por concluir y en mayo se realizarán pruebas en alta mar, bajo la
supervisión de un técnico alemán. Paralelamente, se está remodelando la zona
habitable y los laboratorios de investigación, que deben quedar listos para
octubre”, indicó Vásquez.
Cambios drásticos
Un equipo de este Diario llegó hasta los
astilleros del SIMA, en el Callao, y fue conducido hasta el BIC Humboldt. Allí
recorrió sus siete cubiertas para ver los trabajos de refacción.
Los cambios principales se han llevado a
cabo en la zona inferior. Se ha colocado una hélice de paso variable, un
moderno motor de tecnología alemana –que permitirá reducir el consumo de
combustible–, dos plantas de ósmosis inversa y una planta de tratamiento de
aguas servidas.
El comandante Walter Flores, marino
encargado de la nave, resaltó que con el nuevo sistema de hélice de paso
variable “se podrá maniobrar mejor el buque, ya que ahora la hélice será la que
efectúe los giros y retrocesos”. Antes, ese trabajo lo hacía el eje principal
del barco, por lo que tenía que detenerse antes de girar.
“Las plantas de ósmosis inversa sirven para
convertir el agua salada del mar en agua potable mediante membranas
purificadoras. Producirán diez toneladas de agua al día, en lugar de las dos
que antes se obtenían con la máquina evaporadora. Es un gran beneficio para las
108 personas de la tripulación”, señaló.
Además, también se encuentra en construcción
un auditorio en la antigua sala de procesos de pescado.
Según los planes, el BIC Humboldt estará
listo a fines de año, por lo cual se espera que en la quincena de diciembre
zarpe una vez más hacia la Antártida y llegue a su destino en enero del 2013,
para celebrar los 25 años de presencia peruana en el Continente Blanco.
El Humboldt se alista para celebrar 25 años
del Perú en la Antártida
El BIC Humboldt fue adquirido por el
Gobierno Peruano gracias a un convenio con Alemania en 1978, a fin de realizar
estudios relacionados con los recursos marinos del Perú. Por ello, estaba
preparado para realizar desde diferentes tipos de pesca (arrastre, a media agua
y de fondo) hasta investigaciones in situ gracias a sus laboratorios a bordo.
En una cubierta superior se ha cambiado por
completo el piso de acero. En ella, los laboratorios, camarotes, baños,
lavandería y cocina son remodelados y reconstruidos con ignífugo, un material
resistente al fuego.
Otro cambio importante es la sustitución del
antiguo radar por un sistema satelital en 3D, ubicado en el puente de comando
del buque. Este sistema, valorizado en US$90.000, integra también al GPS y a
todos los equipos electrónicos a bordo, de ese modo controla todos los aparatos
dentro de la nave. Eso se traduce en una mayor seguridad en la navegación.