El mayor fallo de la gestión es que ni los pescadores ni los gestores poseen los conocimientos necesarios para dirigir algo tan complejo como un ecosistema marino costero. El derecho a pescar no se debería basar en si uno dispone del dinero suficiente para comprarse un barco, sino en los conocimientos y la voluntad de trabajar en colaboración con los gestores y los científicos para hacer que la pesca sea sostenible. El derecho a pescar se debería ganar o perder según la voluntad de aceptar unos límites razonables a las capturas.

Paul Greenberg

23 de enero de 2014

LA HAYA Y LAS 200 MILLAS PARA EL PUEBLO PERUANO

 Por: Andrés Luna Neyra (ex dirigente Fetrapep)

           Cuando estén leyendo este articulo probablemente el Tribunal de la Haya ya diera su sentencia resolutiva a favor de los intereses peruanos y nos hayamos regocijado que se haya hecho justicia, pero el interés de este artículo no es aplaudir la recuperación solo de esos 38 mil kilómetros cuadrados de mar que se nos había injustamente apropiado el Estado y la oligarquía pesquera de Chile. Que me alegra como patriota, que aplaudo la sentencia, por supuesto que sí.  Si no es el  deseo llamar la atención poderosamente del gobierno peruano, de los trabajadores del sector, llámese pescadores, proletariado conservero-harinero, de los armadores, de las revistas especializadas, de los profesionales y técnicos de la pesquería, y de todo el pueblo peruano, sobre la triste y penosa  situación económico social que viene existiendo dentro de nuestras 200 millas de mar peruano.

            Me pregunto incesantemente ¿Somos los peruanos los verdaderos dueños de nuestro mar? La respuesta categórica  es  NO. Porque los que vienen apropiándose de nuestros recursos pesqueros son un puñado de oligarcas que no tienen nada que ver con los intereses de los pueblos y trabajadores del sector. Estos se han constituido en los propietarios reales que usufructúan nuestras riquezas por más de 60 años sin que ningún gobierno de turno tenga las agallas de hacer respetar la constitución y la soberanía de nuestros pueblos y su gente, los verdaderos dueños y los que producen las riquezas tanto extrayéndolos como transformándolos en mercancías para la exportación, como la harina de pescado para cerdos y vacas estadounidenses o europeas  y la acuicultura china, las conservas, el curado. El seco salado, el congelado y otras muy particulares como la famosa conservas de pescado para gatos, si para gatos extranjeros. Exportar y exportar y convertir todo lo que tocan en mercancías de exportación. Esta es su característica más importante de estos oligarcas que solo buscan forrarse casi delincuencialmente con las riquezas pesqueras.

           Y ¿para cuándo solucionaremos la pobreza extrema, la exclusión social, la miseria, el hambre, la desnutrición crónica infantil dentro del sector y en todo el territorio peruano? Si  nos damos el tremendo lujo de poseer uno de los mares más ricos del planeta  tanto por la cantidad de especies marinas como por su variedad. Es paradójico tener el mar más rico del mundo cuando los índices de desnutrición crónica infantil ronda el 20% en todo el país y en algunas zonas de nuestras serranías alcanzan las pavorosas cifras del  70%. Es inconcebible que tengamos los recursos para solucionar este gran problema social y no lo usemos para ello, pudiendo dejar la desnutrición  crónica infantil  a cero. No es posible entender como las autoridades y gobernantes que pasaron durante este periodo de 60 años no hayan tomado en cuenta los poderosos recursos naturales que tenemos para solucionar esta lacra social que nos avergüenza ante el mundo entero.

         Debemos recuperar para los intereses de nuestros trabajadores y nuestro pueblo las 200 millas de mar territorial que son sobreexplotadas por  8  FAMILIAS OLIGARCAS y que son bendecidas por nuestros gobernantes durante más de medio siglo, a excepción de Velasco Alvarado. Los 7 u 8 millones de toneladas de anchoveta y pescado que extraemos anualmente  de nuestros mares deberíamos redistribuirlos equitativamente entre todos habitantes y beneficiarnos todos, incluso los niños excluidos de los más alejados territorios de nuestra patria.  Es cierto que la industria pesquera da trabajo a miles de peruanos, pero ¿En qué condiciones? Tenemos que recuperar la dignidad de los trabajadores del sector que como cual parias vienen sufriendo intensamente las miserias más extremas, padeciendo los pescadores activos como jubilados salarios al destajo y pensiones de hambre, los trabajadores harineros-conserveros miserias y largas vedas (6 meses) sin que reciban ninguna paga o compensación, persistiendo con la  R.S. 149-TC que declara la industria pesquera como de temporada desde 1980. Y las peores condiciones de trabajo que conllevan una serie de enfermedades profesionales. A la pesca artesanal siempre la dejaron de lado por que no les interesa la alimentación popular.

        Sin embargo a este puñado de oligarcas y depredadores se les consiente destruir nuestras riquezas marinas con la sobrepesca. EL DECRETO SUPREMO 05 siendo positivo es insuficiente. Ordena y protege una parte desordenada de nuestro inmenso mar, teniendo en cuenta que son 200 millas el total de nuestras riquezas, se les permite el robo descarado en el peso de lo capturado en el pesaje, se les beneficia con los impuestos más  bajos que puedan tener la clase empresarial peruana bordeando irrisoriamente el 4%, se les beneficia con la devolución de impuestos por dedicación dizque a la producción y exportación de productos NO TRADICIONALES, se les permite infectar y contaminar las diversas bahías y playas que bien podrían ser utilizados para el turismo veraniego, se les permite ignorar el mercado nacional  exportando todos los productos pesqueros  que estén a su alcance.  Esta terrible realidad económica-social que se viene dando en el sector pesquero  es insoportable, es vergonzante y tiene que CAMBIAR para el bien de todos los peruanos sin distinción de clase, raza o religión y porque  NO HAY  MAL QUE DURE 100 AÑOS NI CUERPO QUE LO RESISTA. ¿O es que la democracia peruana está hecha  para que los ricos impongan sus condiciones al sufrido pueblo trabajador? ¿Hasta cuando los gobernantes estarán de rodillas BENEFICIANDO a estos asaltantes disfrazados de empresarios?  YA ES TIEMPO DE RECUPERAR NUESTROS MARES.

         LOS PUEBLOS Y LOS TRABAJADORES DEL PERU QUEREMOS QUE SE CUMPLAN LOS ACUERDOS Y RESOLUCIONES DEL TRIBUNAL DE LA HAYA  Y RECHAZAMOS CUALQUIER GUERRA ATIZADA POR LOS TRAFICANTES DE ARMAS

            Dada la situación y realidad social que se vive en los puertos del Perú seriamos tontos procesar una verborrea de guerra entre los pueblos del Perú y Chile. La guerra es lo que menos conviene a ambos intereses, sino acatar pacíficamente sus acuerdos y sus sanciones incluso al día siguiente. Ello no quita que estemos preparados para contrarrestar cualquier grave ofensa a nuestra soberanía territorial por parte de Chile y sus oligarcas dueños de su industria pesquera. Debemos tener en cuenta que a los únicos que les conviene la guerra seria a los traficantes de armas para llenarse los bolsillos con la sangre de dos  pueblos hermanos.  REORIENTAR LA PESQUERIA PARA LA ALIMENTACION POPULAR  Y LA RECUPERACION DE LA DIGNIDAD DE SUS TRABAJADORES, debe ser el camino más justo y dejarnos de beneficiar a un puñado de oligarcas que actúan casi al margen de la constitución y las leyes. Ya es tiempo que los cambios se produzcan en este Perú con caricatura de democracia.

         

18 de enero de 2014

“VIVIMOS EN BURBUJAS INFORMATIVAS CERRADAS Y ESO ES PREOCUPANTE”



Sobre concentración de medios y otros temas de oferta y demanda informativa, conversamos con el periodista y sociólogo Silvio Waisbord, quien participó de la mesa redonda "Diálogo sobre Comunicación: ¿Qué necesita el Perú del comunicador profesional?", organizada por la Maestría en Comunicaciones de la PUCP.

¿Ha variado el concepto de información noticiosa? ¿Qué es lo noticioso hoy?
Creo que la definición clásica de lo que es información (qué, quién, cómo, cuándo, dónde) no ha variado sustancialmente y sigue siendo válida para el periodismo. Lo que ha cambiado es la duración de la noticia, que envejece mucho más rápido por el vértigo y el consumo frecuente de sitios digitales por gran parte de la ciudadanía.

La excusa de los medios suele ser: “damos la información que el público quiere”. Pero pocas veces se hace la pregunta inversa: ¿qué es lo que la ciudadanía realmente necesita del comunicador profesional?

Si tú ves los sitios más visitados, el tipo de contenido qué más circula en Internet no es el que aborda temas pesados (como políticas públicas o problemas sociales) sino temas livianos (ligados al entretenimiento o al espectáculo). Muchos sitios tradicionales, en sus esfuerzos por atraer visitas, ponen constantemente este tipo de periodismo, lo cual no quiere decir que no sea importante hacer el otro.

¿Y cómo generamos interés en contenido que sea a la vez atractivo y de calidad?

El problema es que el contenido en Internet es más efímero que es el contenido en papel. Generar información de profundidad con calidad es una apuesta complicada para una empresa periodística porque requiere de más gente, recursos y tiempo para producir una noticia que no va a durar mucho y no tendrá una buena cantidad de lectores. Lo más rentable y fácil de hacer son notas ligeras. El gran reto es realizar periodismo de interés público cuando los incentivos de las empresas van por otro lado.

¿Estamos mejor informados que antes?

Internet y las plataformas digitales permiten contar con una variedad informativa que nunca antes ha existido. Pero el problema no es el pluralismo de la oferta, sino la escasa demanda por diversidad. Consumimos el mismo tipo de información constantemente, leemos los medios que comparten nuestra visión ideológica o política y no estamos buscando ideas diferentes o contrarias a las nuestras. Vivimos en burbujas informativas cerradas y eso es preocupante.

¿En qué sentido?...

Lea el artículo completo en  la edición de enero de la Revista Pesca


http://issuu.com/revistapesca/docs/revista_pesca_enero_2014/1

2 de enero de 2014

LAS TENSIONES Y CONTRADICCIONES ENTRE LIBERTAD DE EXPRESIÓN Y OTROS CONCEPTOS ASOCIADOS



El Comercio y sus satélites informativos atacan sin piedad al gobierno, al centro derecha que lo apoya y a la izquierda y miman a todas las derechas. A este ejercicio discriminatorio de la opinión y de la información lo llaman libertad de expresión. Es su derecho. A la respuesta tímida a su crítica despiadada la llaman atentado a la libertad de expresión. No tienen razón porque niegan a otros el mismo derecho que ellos ejercen. Los Comercios se sienten intocables y exigen ser tratados como tales. En nombre de la libertad de expresión quieren arrebatársela a sus adversarios. Se sienten todopoderosos porque concentran el 80% del mercado mediático, hecho macizo de la realidad que ha sido criticado por Mario Vargas Llosa y por Ollanta Humala.

¿La concentración atenta contra la libertad de expresión? Según el decano no porque los ciudadanos tienen la libertad de elegir.  Si no les gusta El Comercio y sus satélites –dicen– pueden optar por otros medios. El argumento es, sin embargo, falaz. La libertad de elegir requiere la pluralidad de medios que es negada justamente por la concentración. Con esta no existe pluralidad informativa ni posibilidades de elegir. Esta es una vieja argumentación liberal. John Stuart Mill, un liberal clásico,  sostenía que lo que caracteriza a los seres humanos es, más que la racionalidad, la capacidad de elegir y que para que esta sea posible es necesario que haya diversidad de opiniones. Rechazaba, por esta razón, la uniformidad, el conformismo y la estandarización que trae la modernidad.

La concentración, además, impide la competencia en todos los campos: económico, socio-comunicativo y político. No se puede competir en publicidad, fuente central de los recursos de los medios, con los cuasi-monopolios mediáticos. Es difícil, sino imposible, competir en informaciones y opiniones con un pulpo comunicativo. En el campo político la situación es peor. No hay democracia si no hay pluralidad en las fuentes de información para todos los ciudadanos y para todos los políticos de diversas orientaciones. Sin ciudadanía informada no hay democracia. Esta es una las tesis centrales de Robert Dahl  uno de los teóricos más importantes de la democracia contemporánea. La ingenua tesis de que hay libertad de empresa para competir con los  monopolios informativos no entiende nada de economía ni de los problemas de libertad de expresión en el mundo actual.

Lo que está en el centro del debate es la libertad de expresión y otros conceptos que la acompañan: libertad de empresa, libertad de prensa y libertad de información. Los temas centrales de discusión son los siguientes: La naturaleza de la libertad de expresión (es civil o política o ambas a la vez; es un derecho individual o es también un derecho de las sociedades); sus alcances (es absoluta o tiene límites); las tensiones y contradicciones entre libertad de expresión y otros conceptos asociados (libertad empresa, prensa e información); si la libertad de expresión tiene límites (¿es necesario regularla o no y quienes son los encargados de regularla?

Volveré sobre estos temas complejos. En la teoría política moderna hay dos grandes posiciones sobre la libertad en su relación con el Estado: Los que piensan que la libertad se da dentro del Estado y de la ley (los republicanos, los pluralistas y los liberales) y los que piensan que la libertad solo es posible fuera de  ellos (los anarquistas, los marxistas y los libertarianos). Los partidarios de los monopolios dejan ser liberales para convertirse en libertarianos o en anarquistas por conveniencia. O por sobones de los monopolios mediáticos. En este tema, yo asumo una posición republicana.

 Sinesio López

Fuente

Nota de Pesca

El caso pesquero es sintomático. La ausencia de difusión de los problemas pesqueros reales y de fondo que afectan al ciudadano común y corriente, como exigua tributación, contaminación, subsidios e incentivos perversos, crea un vacío que se llena comentando solamente los problemas de la oligarquía pesquera (relativamente nueva en el país) que daña o estorba a sus intereses.

Y desinformando, como cuando se dice que el Perú es el número 1 en sustentabilidad pesquera en el mundo. Información supuestamente supuesta basada en un informe de la British Columbia University que nunca han expuesto quienes lo afirman. Porque no existe un documento que diga eso.

Mantener al país desinformado de la real problemática pesquera es parte de la  que se emplea.